martes, 21 de octubre de 2008

Adiós al TMS de Madrid

Andy Murray se coronó el pasado domingo como último vencedor en la historia del Tenis Masters Series de Madrid. El torneo que la capital de España ha acogido desde el 2002 ha vivido su última edición. El año que viene, da un salto de calidad, hacia arriba. Hacia muy arriba.

La ATP ha decidido reformar el calendario del tenis (nuevo calendario aquí), y Madrid ha estado en primera línea para llevarse uno de los premios gordos. A partir del año que viene, la capital de España acogerá un torneo con cuadro masculino y femenino. Será en el mes de mayo, antes de Roland Garros. El nuevo torneo de Madrid se disputará en un nuevo y majestuoso recinto, la Caja Mágica, y sobre tierra batida.

El Masters Series, que le daba vida cada octubre al inicio del otoño en Madrid, echa el cierre. Han sido 7 años de torneo donde Madrid ha creado escuela, con innovaciones nunca vistas en el tenis, y que todavía se siguen sin ver en otros torneos.

Para empezar, el torneo de Madrid se creó sin que hubiera en la capital ninguna cultura tenística previa. El torneo más importante que hubo en nuestro país hasta la llegada del TMS madrileño fue el histórico Conde de Godó en Barcelona. Pero en la capital sólo se disputaba el Villa de Madrid femenino, al que las autoridades han olvidado por completo con el paso de los años (de hecho, ya no forma parte del circuito WTA). No había una cultura tenística previa, y lo que es peor, sigue sin haberla. La única cultura que se ha creado es la de pasión por los tenistas españoles, y casi exclusivamente por Nadal. Nada más. Sólo hay que recordar las caras de los espectadores cuando Nadal estaba a punto de perder su semifinal del sábado frente a Simon. Caras de tragedia. Es Nadal, pero el tenis sigue.

Como apunte, a cada voluntario del torneo se le dan hasta 16 entradas para que invite a gente y que así el recinto tenga un aspecto decente en los primeros días de torneo.

Tema recogepelotas. Lo de poner modelos para recoger las pelotas sigue siendo una VERGÜENZA. Y no porque sean mujeres (cuando Madrid ha acogido el Masters Femenino han puesto a modelos masculinos), sino por todo lo que conlleva.

Hasta ahora, en todos los torneos conocidos del planeta, los recogepelotas eran niños, habitualmente de clubes de tenis de la ciudad donde se disputa el torneo. A estos niños les hace una ilusión enorme poder estar cerca de áquellos a los que un día quieren parecerse. Pero en Madrid no es posible. En Madrid, a los grandes, entre ellos Nadal, les recogen las pelotas modelos profesionales. Modelos que por supuesto, reciben un sueldo por ese trabajo, mientras que los niños nunca han visto un duro. Las modelos siguen apareciendo además, en los partidos televisados. Los de Nadal y Federer, por ejemplo. Por lo que los niños tampoco salen en la tele. Como los grandes juegan por la tarde, son los niños a los que les toca madrugar o estar hasta altas horas, en los últimos partidos que arrancan a las 22.00 horas.

Las pantallas publicitarias. Ningún otro torneo tiene instaladas pantallas de leds como vallas publicitarias. De estas pantallas de leds se quejaban los jugadores en las primeras ediciones porque les despistaban los colorines. Y es que gracias a estas pantallitas mágicas, la publicidad puede ir cambiando durante el partido. La historia es que en el resto de torneos, en vez de pantallas de leds, la publicidad está serigrafiada en lonas. Con estas lonas, la fuerza de las pelotas de tenis se absorbe, mientras que si una pelota golpea en una pantalla de leds, al ser algo firme, vuelve a mitad de la pista. Y puede incluso darle a un tenista en ese regreso.

El Madrid Arena, el recinto principal, es un lugar muy cómodo y funcional para jugar al tenis, salvo por sus interminables pasillos. Pero es necesario que haya más pistas, necesarias para las primeras rondas. En el Masters Series de Madrid ha habido otras 2 pistas (llamadas Alcalá y Cibeles), encajadas con calzador en los pabellones anexos al Madrid Arena. Porque eso sí, el espacio para los VIPS no puede faltar. Hay más espacio para VIPS (entre Salas VIPS, Restaurantes VIPS, sitio para patrocinadores) que para jugar al tenis.

Y lo de los palquitos. En todos los torneos hay espacio para algunos privilegiados (autoridades, patrocinadores), pero es que en Madrid se llega al culmen. Todo el anillo inferior del Madrid Arena está reservado para estos palquitos rojos, por donde desfilan famosos con más o menos idea de tenis. Y los verdaderos aficionados del tenis, por mucho que quieran, han tenido que ver el tenis desde las alturas.

Además, a los "dueños" de estos palcos sólo le interesaban los partidos de los grandes (Nadal, Federer) y en el resto de partidos muchos de estos palcos estaban vacíos con la pobre imagen que eso supone en la realización televisiva. Si pierden los grandes, ya no hay famosos (sólo hay que ver cuántos había en la final del domingo), y hay que recolocar entradas a última hora.

Tampoco existe en ningún otro torneo un espacio en plena pista para medios gráficos en forma de corralito. Es lo que tiene las pantallas de leds. En el resto de torneos, se hacen huecos en las lonas para que se coloquen los fotógrafos.

Para el nuevo Torneo Combinado que se disputará desde mayo, aparte de arreglar todo lo apuntado, hagánnos un favor: cambien el logo que tienen previsto. Es horrendo. Peor que el de los Juegos de Londres, que ya es decir.

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