El mal torneo de España hasta el momento (aunque vaya en ascenso) hace que nos encontremos en una situación inversa a la de los últimos años. Hasta ahora, solíamos quedar primeros de grupo y a esperar rival. Y a veces el destino se ponía en contra, y algún equipo fuerte había hecho un mal torneo y nos tocaba como rival (el ejemplo más claro, Estados Unidos en los Juegos de Atenas). Ahora hemos sido nosotros los que hemos hecho exactamente eso. Y el "premio" le ha caído a Francia.
Realmente, al pensar en Francia, a muchos sólo les viene a la mente el gran Tony Parker. Y es cierto que buena parte de la suerte gala depende de si el jugador de San Antonio está o no enchufado, pero si Francia llega invicta a cuartos, por algo más será. En todo caso, nuestra selección tiene la ventaja de ofrecer a priori más nombres que asustan.

Parece que a muchos no les ha gustado el tener que jugar en dos días seguidos el último partido de la segunda fase y los cuartos de final. Pues bien, haber quedado primeros o segundos de grupo. Así jugaríamos el viernes. Y todo tiene su punto de vista. Quedando cuartos de grupo, jugaremos dos días seguidos, y si ganamos, habrá un día de descanso hasta otros dos partidos seguidos por las medallas (y en todo caso los habrá, aunque sea luchando por el 5º puesto). Si hubiéramos sido primeros o segundos, mañana descansaríamos, pero enlazaríamos tres partidos seguidos (viernes, sábado y domingo). Lo único malo es el desplazamiento entre estos dos partidos entre Lodz y Katowice.
Mañana, el ser o no ser en los cuartos de final frente a Francia. A las 21.00 horas, en La Sexta.
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